La caída de un gigante

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LA CAIDA DE UN GIGANTE
Mayo- 20- 2012- Isaías 12-14
	Dios quiere que el hombre viva bien, y él sabe que mientras estemos en este mundo necesitamos de los recursos económicos por eso dentro del plan de Dios está el que seamos personas victoriosas, prosperas, personas de éxito, para esto Jesucristo nos ha dotado de todo lo necesario, a ello le llamamos dones y talentos, nos ha dado la capacidad de inventar de crear ya que somos hechos a imagen y semejanza de Dios. Por lo tanto que lleguemos a ser personas grandes y de mucho reconocimiento no es pecado.

Dios permitió que babilonia llegara a ser una ciudad grande y de mucho reconocimiento, pero se desplomo. Isaías 13: 19- 21 “Y Babilonia, hermosura de reinos y ornamento de la grandeza de los caldeos, será como Sodoma y Gomorra, a las que trastornó Dios.  13:20 Nunca más será habitada, ni se morará en ella de generación en generación; ni levantará allí tienda el árabe, ni pastores tendrán allí majada;  13:21 sino que dormirán allí las fieras del desierto, y sus casas se llenarán de hurones;allí habitarán avestruces, y allí saltarán las cabras salvajes.”

Que origino que cayera babilonia, que es lo que origina que caiga un gigante.

1. PERDIDA DEL PROPOSITO: 1 Timoteo 2: 4“el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad.” El propósito o el deseo de Dios es que todo el mundo sea salvo y que tengan el conocimiento de Dios, para lograr este maravilloso propósito, Dios da los recursos humanos y físicos. El problema es que muchos después de recibir la bendición se les olvida y solo piensan en sí mismo. Que propósito tienes en tu vida lucha por conseguirlo no te desvíes de él.

QUE HACE QUE SE PIERDA EL, PROPÓSITO DE DIOS O DE NOSOTROS MISMOS:

1. LA ALTIVES: la persona altiva es aquella que se cree más que los demás, es orgullosa, altanera, y humilla a los demás. Isaías 14: 13- 15 “Tú que decías en tu corazón: Subiré al cielo; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte;  14:14 sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante al Altísimo.  14:15 Mas tú derribado eres hasta el Seol, a los lados del abismo.”  Una persona altiva tiene muy mala relación con los demás, por eso siempre termina siendo aislada y rechazada por los demás. 

2. BANAGLORIA: es aquella persona que siempre se jacta de sus cualidades, se vuelve petulante, se vuelve egocéntrica, acapara las conversaciones solo hablando de sí mismo. Siempre cree que las cosas existen por él, parece un yoyó, para él solo existe el yo, yo, yo. El aplica la filosofía de primero yo, segundo yo, tercero yo, y por ultimo…. yo. Daniel 4: 30 “habló el rey y dijo: ¿No es ésta la gran Babilonia que yo edifiqué para casa real con la fuerza de mi poder, y para gloria de mi majestad?”

Pero las consecuencias no se hicieron esperar. Daniel 4: 31-32 “Aún estaba la palabra en la boca del rey, cuando vino una voz del cielo: A ti se te dice, rey Nabucodonosor: El reino ha sido quitado de ti; 
4:32 y de entre los hombres te arrojarán, y con las bestias del campo será tu habitación, y como a los bueyes te apacentarán; y siete tiempos pasarán sobre ti,”

El castigo duraría hasta que el rey reconozca que es Dios quien tiene el Dominio y el poder. Daniel 4: 32 b “hasta que reconozcas que el Altísimo tiene el dominio en el reino de los hombres, y lo da a quien él quiere.” Los hombres tan solo somos un medio un instrumento en las manos de Dios.

3. AUTOSUFICIENCIA: ser autosuficientes no es malo, es mas debemos aprender a valernos por nosotros mismos; lo malo es cuando llevados por la altivez y por la vanagloria creemos que no necesitamos de nadie y menos preciamos a los demás, incluyendo a Dios mismo. Es un hecho que para los que son derechos, el brazo izquierdo no sirve de mucho…pero quien está dispuesto arrancárselo de su cuerpo. ¿Cierto que no? En el cuerpo de Cristo y en la sociedad todos somos importante. La autosuficiencia descontrolada nos lleva a la desobediencia. Este fue el comienzo del fin de babilonia. Génesis 11: 3 “Tenía entonces toda la tierra una sola lengua y unas mismas palabras. 
11:2 Y aconteció que cuando salieron de oriente, hallaron una llanura en la tierra de Sinar, y se establecieron allí. 
11:3 Y se dijeron unos a otros: Vamos, hagamos ladrillo y cozámoslo con fuego. Y les sirvió el ladrillo en lugar de piedra, y el asfalto en lugar de mezcla”

La piedra era la base primordial para la construcción de altares o demás edificaciones. PIEDRA: significaba. Dependencia de Dios, la piedra era lo sobre natural, lo hecho por la mano de Dios.

Pero ellos remplazaron la piedra por el LADRILLO. Que significaba poder humano, algo hecho por el hombre. No porque sea malo utilizar nuestros dones, lo malo esta cuando dejamos que los dones que nos dio Dios nos aleje de él. O que los utilicemos para cosas que a Dios le molesta.

4. ANHELO DE FAMA: Génesis 11: 4 “Y dijeron: Vamos, edifiquémonos una ciudad y una torre, cuya cúspide llegue al cielo; y hagámonos un nombre, por si fuéremos esparcidos sobre la faz de toda la tierra.” Muchas personas por amor a la fama no les importa pasar por encima de cualquiera, muchas personas son capaces de cometer actos abominables con tal de ser reconocidos públicamente, muchos se fingen siervos de Dios pero lo único que los motiva es el adquirir fama. La fama en si no es mala, Jesucristo era un hombre famoso al igual que salomón y otros siervos de Dios.  La fama no es más que el reconocimiento de lo que hacemos, lo malo es cuando la fama está por encima de cualquier otro interés.

Babilonia más que una ciudad es un estado defectuoso de la persona que nos lleva a la destrucción de nosotros y de los demás. Ese estado nos lleva a vivir de una manera falsa, en lo secular  tenemos relaciones mentirosas y en lo espiritual vivimos una Adoración falsa delante de Dios.

Es por esta razón que Jesucristo nos manda a salir de ese estado babilónico en el que podemos estar. Apocalipsis 18: 4 “Y oí otra voz del cielo, que decía: Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas;”

La humildad nos hace grandes, nos hace ser agradecidos y nos hace adorar al rey: Isaías 12: 1, “En aquel día dirás: Cantaré a ti, oh Jehová; pues aunque te enojaste contra mí, tu indignación se apartó, y me has consolado; Cantad salmos a Jehová, porque ha hecho cosas magníficas; sea sabido esto por toda la tierra. 
12:6 Regocíjate y canta, oh moradora de Sion; porque grande es en medio de ti el Santo de Israel.” la fuerza más grande que nos motiva adorar a Dios es el agradecimiento, recuerda de donde te saco y lo que ha hecho de ti. 

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